Durante estos duros meses de necesaria medidas sanitarias y de prevención, las actividades públicas de las hermandades se han visto también alteradas.
Aún así, la actividad de solidaridad, de apoyo y entrega continua dentro de las limitaciones de las organizaciones y cofradías.
Además, se abre un interesante y necesario espacio como son los centros de culto, las parroquias que son un espacio de recogida, y permiter retornar del espacio pública al espacio sagrado durante estos meses.
Los teatros y espacios abiertos son también limitados, pero algunas hermandades tímidamente comienzan a realitzar algunas actividades en este sentido.
Una de ellas es la Hermandad Ntro. P. Jesús Nazareno y Ntra. Sra. de la Esperanza de Mataró que tuvo que aplazar hasta en dos ocasiones, una en la Casa Hemandad y otra la parroquia de Maria Auxiliadora el acto de reconocimiento a voluntarios y profesionales.
Ahora empieza con este humilde acto junto a las menciones Fidelitas cofrades en un evento de avivamiento, de despertar, el avivamiento cofrade con grandes medidas, pero posible.
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